Fernando Delgadillo enfrentó su propia crisis de la edad media al cumplir 30 años como compositor. Para darle la cara a ese bloqueo artístico, el trovador decidió reinventarse y dejar atrás su faceta como artista independiente para firmar con la disquera transnacional Sony Music, con el objetivo de cruzar las fronteras con su música.

El cantautor vivió las dificultades de ser parte de un sello discográfico con alcances limitados. Con temor, por la reacción de sus seguidores más tradicionalistas, Delgadillo abrazó la propuesta de lanzar el álbum Sesiones acústicas, bajo el mismo sello de Beyoncé, Alan Walker, Shakira o Maluma.

“Cada 10 años tengo un auto-examen para ver cómo me está yendo, qué diferencias hay. Resultó que estaba pasando por la crisis de los 30 años de componer (risas) por el lado independiente, estaba lleno de éxitos y logros, pero también era cierto que no estábamos sonando en otros países. Mi disco no estaba en ningún lado.

“En un principio me sentí hasta culpable, porque tantos años de ser independiente y de repente firmar, es otra la dinámica, sobre todo porque hay mucho bluff, eso es lo que se critica, estar fuera de piso, que no está aterrizado el artista. Sí hubo críticas, pero también apareció, inesperadamente, gente que me defendió”, dice Delgadillo a Crónica.

El músico quiere dar un sentido más incluyente a su propuesta, catapultarla fuera del “pequeño grupo formado con los amantes de la trova. Creo que es una canción universal, siempre lo ha intentado ser (…) Tenía que haber un cambio, era necesario, las viejas fórmulas ya no funcionaban”, expresa.

Sesiones acústicas es, a decir del propio Delgadillo, “una compilación de 14 discos”, con el propósito de atraer a un grupo distinto con el cual “creció”, ocupado con compromisos familiares, y alejado de conciertos. “Quiero empezar a cautivar al público joven con este tipo de trabajo. Es más fácil si comenzamos con éxitos y (canciones) nuevas”, abunda.

La meta ahora para el compositor es seguir escribiendo, “no se trata de vivir de viejas glorias”, acepta. El contenido de esta nueva inspiración versará entre líricas de amor, humor social y particularmente con un llamado ante la coyuntura actual: “Hay que cantarlo, considero la importancia de que México revalorice, mire hacia sí, que componga lo descompuesto.

“Considerar todos estos valores prioritarios: salud, educación, libertad y justicia para que también nos tengamos respeto (…) Por otra parte está la construcción del muro, que ya estaba, nada más este señor lo hace más público. Trae una política discriminatoria, nos toca por ser el país vecino, así que es hora de que compremos lo hecho en México”, finaliza.

Consciente de la esencia contestataria de la trova, Fernando Delgadillo se compromete a seguir alimentando la lucha con voz, música y lírica, eso sí, siempre poética, en directo el 11 de febrero próximo, en su tradicional concierto en el Parque Naucalli a las 20:00 horas, en el Foro Felipe Villanueva, donde presentará todos sus éxitos acompañado del grupo Mexicanto.