Se atribuye la aparición de la imagen que se considera un cristo vivo un 3 de mayo de 1901.
Una mañana del 3 de mayo de 1901 un pastor que caminaba en las faldas de La Malinche encontró la imagen de un cristo en medio del bosque.
116 años después, esta imagen es objeto de culto y devoción entre los creyentes católicos de la zona sur de Tlaxcala, quienes cada 5 de mayo llegan a las faldas de la montaña a realizar asistir a una feria poco convencional.
La creencia católica señala que la aparición de El Señor del Monte provocó la visita de los habitantes de distintos municipios de la zona como San Pablo del Monte, Tenancingo, Teolocholco, entre otros, que intentaron llevarlo a la iglesia de sus respectivas demarcaciones.
Todos lo intentaron, pero ninguno de los grupos pudo levantar el peso y fue hasta que los vecinos de Papalotla lo cargaron cuando la imagen pudo ser movida y por esa razón yace en la iglesia de esa demarcación donde es la imagen principal.
Los pobladores también relatan las historia de que la imagen del cristo no tenía en un inicio la cruz ni el cabello, sino que apareció cuando llegó al lugar donde fue depositado.
En medio de ese fervor por la imagen, cada año, primero el 3 y ahora el 5 de mayo, los vecinos de los municipios de las faldas de La Malinche suben a visitar a la imagen que es altamente venerada.
Aunque prevalece la devoción católica y desde un día antes llegan peregrinos a pie a visitar la imagen, la festividad también está presente. De esta forma, el camino hacia donde se encuentra la imagen esta llena de puestos donde se venden todo tipo de comidas y bebidas, juguetes y todo lo que se pueda imaginar para una feria popular, con minichelas de 10 pesos e improvisadas pistas de baile con dj's listos para poner los éxitos del momento.
En la celebración de este año miles de feligreses asistieron puntuales a la cita sin importar el clima y una pertinaz lluvia que los cubrió.
En la edición de este año, se reportó saldo blanco en la celebración y sólo se registraron quejas por el Operativo de vialidad que no permitió el acceso de manera adecuada, ya que en algunos puntos se congestionó al grado que no era posible el paso y en otros se tenía completamente despejado.