Josefina quiere ser Presidente de México pero… ¿Y los demás quieren?

Muchas opiniones, muchos rumores y una gran polémica acerca del evento realizado hace días,  en el que Josefina Vázquez Mota (haiga sido, como haiga sido) recibió constancia de triunfadora  del proceso interno para la elección de Candidato a la Presidencia de la República del Partido Acción Nacional  de manos del Presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN y rindió protesta ante la máxima autoridad de su partido político, representada en la persona de Gustavo Madero Muñoz. 

El hecho legal y legítimo fue consumado. No hay vuelta atrás, su candidatura está en  pie y su registro ante el IFE también (aunque su llegada  a la sede nacional del IFE haya sido peliculesco y setentero cursi en motocicleta ).  Josefina está firme, con gran dignidad y fortaleza, no ha pasado nada que no enfrente una mujer, siempre que tenga la audacia de conquistar nuevos espacios, ahora imagínese si se trata de la Presidencia de la República, ni más ni menos!

El evento de su toma de protesta, en opinión mía –y compartido por otros y otras  – es  muestra de una guerra emprendida y alentada por  misoginia, androginia, oscuros intereses, ambición y enamoramiento del poder, a los cuales no conviene y detestan la idea del arribo de una mujer a la Presidencia de la República. Con la imagen de una mujer presidenta ( no digo que sea mágico , pero influirá), se avecinan cambios,  revisión de cuotas de género en todos los sectores, impulso al empoderamiento de la población femenina, arrastre casi natural de mayor equidad y revisión ( exigencia) de percepciones económicas  generales equilibradas entre hombres y mujeres de este país. Y si una pudo y una puede, ¿ porqué, es que no pueden muchas?! No, no me he fumado nada y como está de moda, me sujeto si es necesario al antidópin y al estilógrafo,  bolígrafo ese o como se llame para detectar mentiras.  

El Estadio Azul, lleno y después medio vacío ¿ qué pasó?, Josefina, muy señora, discreta, ha guardado silencio respecto a lo que pudiera significar enfrentamiento abierto con su propio partido político o en particular con algunos personajes de su partido político. Solo la inocencia podría creer  que el acarreo deliberado de no militantes,  primero hacia dentro  y luego hacia afuera,  no fuese acción sistemática   para tratar de reventar el evento ¿y del Estado de México? ¿Quién los llevo?  ¿Porqué los llevó?  A decir de muchos militantes directamente ligados con ella ( recordemos que Josefina, no fue  la candidata de Calderón) y  que votaron por ella, la mayoría activos y adherentes marginados de las estructuras partidistas controladas, más los militantes que de último momento dieron vuelta  a Cordero para no quedarse fuera, comentan que cuando les hicieron la invitación para acudir a la toma de protesta, les fue informado deberían  seguir el procedimiento para obtener el pase de ingreso al estadio en la forma establecida, organizada y determinada por el CEN del PAN. ¡Ahí está el detalle!

El efecto busco erosionar la seguridad y posicionamiento de la ahora Candidata Presidencial, ¿porqué? Porque nadie o casi nadie se salva de la enfermedad de querer ser Rey vitalicio y tratar de imponer  agenda y posiciones que no le corresponden.

Josefina, no es un mito, es una competidora real que expone las ambiciones de otros partidos políticos, grupos de poder y personajes que desean perpetuarse en el poder. Lo ha expresado y lo expresó en su toma de protesta…Los verdaderos dueños de los partidos políticos, son los ciudadanos.

Es verdad, hubo errores de su equipo, los más grandes: exceso de confianza y sometimiento, recordemos que Roberto Gil Zuarth, es el Coordinador de Campaña pero también fue secretario particular de FCH, etiqueta mental de la que aún no se desprende y que le costó salir a hacer el oso de incompetente ante los medios, cierto también que como en todos los equipos de campaña, todo mundo se siente general y nadie peón: el costo, riesgos por vedetismo.

Así, Roberto Gil Zuarth, ha ofrecido como ofrenda  de sacrificio su cabeza, solo su cabeza, porque su candidatura plurinominal está intocada.   

Que este contratiempo serio,  porque lo es, sirva para que  la ya Candidata Presidencial, reafirme y recomponga de manera inmediata todo lo necesario, entre otros elementos, la conformación de su equipo, no únicamente con figuras destacadas que le favorecen en un sentido, sino distinguidas y probadas por su  trayectoria de resultados  políticos, organizativos y logísticos, sean o no sean panistas o cuando quiera despertar será tarde.

No sea que después lloré porque su mamá no vaya a vivir en  Los Pinos. Si  llega a ser presidenta, será como ya es desde ahora,  sujeto de valoración y  cuestionamiento de todos los mexicanos desde lo público hasta lo privado.

 Quienes  han deseado el desplome de Josefina, subvaloraron que no ha retrocedido un solo paso, ninguna mujer renunciaría a escribir  el nuevo capítulo de la historia política de México ante oportunidades y retos actuales para una diferencia sustantiva. Otro aspecto no considerado es que si la estrategia buscó deteriorar su posicionamiento e imagen  para negociar prebendas, inmunidad y otros beneficios no consideró que la reacción se ha transformado en propulsor de la solidaridad femenina,  simpatía y aliento del voto de género hacia ella,  recordemos que las mujeres integran más del 52 por ciento del padrón electoral.