Raymundo Pérez Romero

Tlaxcallan, Tlaxcala, Tlaxcaland

 No todas las pasiones que experimentamos son naturales, las pasiones naturales son muy limitadas. Pero éstas se ven modificadas por causa extrañas a la naturaleza (opiniones y prejuicios sociales). El origen y principio natural de las pasiones es el amor de sí, del amor de sí surge la benevolencia hacia los que los rodean; al ampliarse las relaciones con los demás aparecen las compasiones y preferencias, y a la preferencia por alguien va unido el deseo de ser preferido.

J. J. Rousseau, El Emilio

La educación en el tiempo

La decisión de estudiar es una elección propia que nace de la afinidad a aprender y saber cosas nuevas, esto parte de comprender qué es lo que se aprende y para qué sirve, con este motor, el principal factor será desarrollar mejores opciones de trabajo en nuestra vida.

Si contamos que el aprender también es motivado por nuestros padres, se hará fácil el camino de los aprendizajes propios de cada época, mismos que serán de utilidad para la mejora de la vida de la ciudadanía. El conocimiento que se acumula a través de los años hace cada vez más especializados a los alumnos en la sobrevivencia que requieren las nuevas generaciones, quienes con su mirada nos dejan un legado a las presentes y futuras sociedades.

A pesar de que la apertura constante de nuevos saberes nos lleva por caminos cada vez más transitados de competencia, la supervivencia es el punto central donde se concentran las aspiraciones, miedos y deseos de los tutores, quienes en su afán de quitar de manera gradual los lazos que los unen con la descendencia, los motivan a ser autosuficientes y por medio de esta confianza crecer en el conocimiento.

En épocas precortesianas, la sociedad era genérica pues cada padre tenía bajo su responsabilidad enseñar a su hijo a ser proveedor, cazador y defensor de las generaciones futuras, con ello se aseguraba que tras no existir, su descendencia iría por un buen camino de salvamento, mientras que la madre era la encargada de mantener entre su descendencia prendida la enseñanza de cultivar alimentos, hacer que sus hijas fueran hacendosas, cocinar y mantener la unidad de cada uno de los integrantes de la familia.

Aunque para quienes mantenían el poder, los conocimientos se especializaban en materias de astronomía, medicina y política, éstas eran mostradas en espacios destinados para ello como el calmecac y telpochcalli, ahí se reunían quienes tenían hambre por conocer a profundidad otras temáticas inherentes a la propia sociedad.

A medida que los españoles se asentaban en tierras tlaxcaltecas, los conocimientos que eran impartidos a los infantes y adolescentes tenían que ver con la cultura europea, la cual estaba basada en la religión y en otros temas más amplios de herencia grecolatina que iban con la lingüística, oratoria, filosofía, matemática y artes. Con ello los conocimientos eran más bastos y se comenzó a clasificar quiénes tenían habilidades y destrezas en los nuevos saberes, que para ser objetivo, estos eran dados por los frailes franciscanos que fueron los transmisores de la fusión de conocimientos.

Durante la colonia, poco a poco el gobierno administró la manera de enseñar, pasó de ser dada por la iglesia de forma absoluta a combinarla con la educación de la clase alta que era la única que tenía acceso a conocimientos más complejos y profundos, además de ser la que podía solventar la salida a otras escuelas superiores fuera de la entidad, por lo que ir a la capital del país o a España, eran los factores de motivación destinados a quienes tenían los recursos económicos.

Más adelante, con la obtención de la independencia nacional, todo el país quedó en una incertidumbre de todos los temas de interés general por lo que la educación de la sociedad hecha en conventos, pasó a ser privilegio para quienes podían salir a las grandes metrópolis de México y con ello proseguir en su deseo de salir adelante, las profesiones aumentaron y la condición de saber creció al no ser conocimientos sobre religión sino que fue dando pasos a la secularización que partió la forma de entender a la educación de corte religiosa.

Con la modernidad en el país, la introducción de métodos de enseñanza de otros países se aplicó en nuestro país y con ello, la libertad permaneció entre los maestros que serían los encargados de llevar a las aulas los elementos de conocer el mundo a través de la división de grados de escolaridad que motivó a emplear a más docentes especializados, ahora las generaciones presentes podían aspirar a llegar a grados cada vez más de profundidad para destacar.

Con la construcción de escuelas, el fin del siglo XIX comenzaba con el alba de la educación más o menos como la conocemos ahora, que fue administrada en escuelas donde los géneros podían acompañarse en el aprendizaje y éste fuera de interés para con los alumnos. Con ello el siglo XX dio un paso gigante al preparar a gente para seguir estudiando y mantener la secuencia de conocimientos acordes a su edad, el paso de la primaria al bachillerato fue interrumpido por la creación de la secundaria y ésta a su vez permitió crear gente con conocimientos de oficios de aplicación a la vida propia.

A medida que iba creciendo la población, el preescolar pasó a formar gente que se hacía de disciplina en la escuela y mantener la idea de conocer en el aula, acompañado de un maestro-docente.

Ya en nuestro siglo XXI, la educación pasó a ser más dinámica, con nuevas formas de enseñanza al ampliarse el espectro de la información y al haber nuevas ofertas de aprender con lo que la sociedad seguramente seguirá en la propuesta de saber cómo y para qué se aprende así cómo esto nos debe ayudar a ser una mejor sociedad.

Nos leemos pronto, hasta luego.

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