Fuente: El Universal

Hablar de María Rojo es hablar de la cadencia sensual del danzón, el deseo en una tarde de estudio y la valentía ante la injusticia del mundo, así han sido algunas de las mujeres que esta primera actriz ha encarnado a lo largo de 62 años de carrera artística, en los cuales el cine, el teatro y la televisión se han rendido a sus pies.

Incansable y con diversos proyectos en puerta, María festeja el día de hoy 70 años de vida, por lo cual la también ex senadora ya tiene planeado cómo quiere celebrar tan especial acontecimiento. “Me voy a Acapulco, pero antes como con mi hijo (Santiago), después hago dos días de trabajo y luego me voy”.

Para ella el paso del tiempo no es algo que le quite el sueño o le preocupe, simplemente lo toma con buena actitud y filosofía, “es sólo eso, cumplir un año y que bueno que lo viví” –agrego- “sigo trabajando, haciendo cosas bonitas, contenta y bien”.

Su historia en los escenarios comenzó cuando contaba con apenas ocho años de edad a lado de Enrique Alonso “Cachirulo”, en el programa del Telesistema Mexicano, Teatro Fantástico.
 

En 1956 hace su debut en el séptimo arte con la película Besos prohibidos, a partir de ese momento encontraría en este medio uno de los mejores lugares para expresarse. En su haber se encuentran más de 70 películas, entre las cuales destacan en la primera etapa de su carrera: El castillo de la pureza (1973), Los cachorros (1973), Y El apando (1975), film de Felipe Cazals con el cual María Rojo Ganó gran notoriedad y reconocimiento con su papel de “La Meche”, que le dio la nominación al Ariel a Mejor Actriz; ya contaba con 32 años de edad en ese entonces.
 

Siempre controversial, sus siguientes trabajos llamaron la atención por su marcada carga sexual o la crítica que se hacía a la sociedad, por ejemplo, La tarea (1990), donde compartió créditos con José Alonso, e interpretará a Virginia, una mujer que seduce a un amigo, mientras lo filma todo para su clase de cine; también están Las Poquianchis (1976) y Rojo Amanecer (1989).
 

Otras películas emblemáticas de María Rojo son Danzón (1991), El callejón de los milagros (1995) y de noche vienes Esmeralda (1997). Actualmente la actriz espera el estreno de los largometrajes Las horas que pasé contigo, de Carolina Aguilar Mastretta; y jirón de niebla, de Julio César Estrada. 
 

María no ha sido inmune a la magia de un escenario teatral, Fiesta de cumpleaños, Manos arriba, Cada quien su vida, y recientemente El chofer y la señora Daisy conforman su historia en teatro. “Fue el reto de hacer algo tan distinto a lo que he hecho siempre, porque no tiene nada que ver conmigo la señora Daysi, es un personaje que nunca había interpretado, además tenía ganas de volver al teatro con una obra de calidad”, comentó María Rojo.
 

En la pantalla chica también ha tenido una nutrida participación, alrededor de 33 programas y telenovelas avalan su paso por este medio. La hora marca (1986), Muchachitas (1991). La antorcha encendida (1996), Te sigo amando (1996), Lo que callamos las mujeres (2001), Corazón salvaje (2009), El albergue (2012) y Mujeres asesinas (2008), son algunos de sus trabajos.

Durante 15 años se involucró en la vida política del país, primero como Diputada federal en la Cámara de Diputados, en el periodo de 1997 al 2000, después como Jefa Delegacional de Coyoacán, de 2000 a 2003, y por último como senadora plurinominal en la Cámara de Senadores.
 

“Hace 15 años presenté, la primer vez que fui diputada, la Garantía Constitucional del Derecho a la Cultura, esto costó mucho porque es una reforma Constitucional, y se vino a aprobar hace como 12 0 13 años, se aprobó en la Cámara de Diputados la que yo presenté”, recordó María.

Rojo siguió con su balance, donde se incluye el impulso que hizo por el Estímulo Fiscal 226 y 226 bis, en apoyo al cine y al teatro, y además “de estos 15 años, fui la que propuse en la Comisión del Centenario la Constitución en las lenguas indígenas, puse las letras de oro de Carlos Fuentes en el Senado, las de Sor Juana Inés de la Cruz en la Asamblea Legislativa, fui la que pidió que Granados Chapa tuviera la Medalla Belisario Domínguez, y así te puedo decir que sí estoy contenta de las cosas que hice”.