En las calles del municipio de San Pablo del Monte, patrullas de la policía municipal y trabajadores del ayuntamiento se hacen de la vista "gorda" cuando se estacionan sobre los "pasos de cebra", a pesar que las líneas fueron marcadas sobre el pavimento, para permitir el tránsito de los peatones.

Mientras los ciudadanos enfrentan el endurecimiento general de las normas viales con multas más altas, al estacionarse en lugares prohibidos, los propios policías no respetan su Reglamento de Tránsito en sus ordenamientos más elementales.

Un estudio de la Dirección Nacional de Tránsito y Viabilidad (DNTV) establece que cientos de motoristas irrespetan estas franjas peatonales, y que por esa razón ocurre gran parte de los atropellamientos.

Juan Xochicale, habitante de San Pablo del Monte, lamentó que sean las propias autoridades de vialidad, los primeros en violentar las normas al Bando de Policía y Buen Gobierno municipal, "ellos se estacionan en lugares prohibidos, pero cuando un ciudadano por necesidad lo hace, si lo multan o le piden mordida a cambio de que no lo infraccionen".

Las imágenes, evidencian como los policías  provocan problemas que deberían atender al obstruir el paso a peatones, por lo que éstos se ven obligados a caminar por áreas donde se exponen a sufrir algún accidente.