Tras haberle sido retirado el sello oficial y llaves de la presidencia de comunidad de San Juan Quetzalcoapan, en Tzompantepec, la presidenta Susana Camarillo Hernández, denunció en rueda de prensa que ha sido presionada para retirarle el cargo.

La denunciante indicó que dará parte de lo sucedido ante el órgano de Fiscalización Superior (OFS), pues teme que haya un mal uso a sus herramientas de trabajo y responsabilizó directamente al presidente municipal Arturo Rivera Mora por haberle impedido el acceso a sesiones de cabildo.

Señaló que desde el pasado 21 de enero, la síndico municipal y el secretario del ayuntamiento le refirieron que estaba destituida de su cargo, siendo que su elección no fue por “usos y costumbres”, sino por medio de un proceso electoral, por lo que insistió que su destitución sería ilegal.

Posteriormente la presidencia de comunidad fue cerrada, mientras que el cobro de agua potable se realiza al exterior de la misma, en un módulo de policías, hecho que, dijo, pone en duda a los ciudadanos de Quetzalcoapan.

Acusó que, en reunión con Arturo Guevara, secretario en el ayuntamiento pretendió obligar a Camarillo Hernández y así cobrar sus quincenas anteriores con la condición de firmar su renuncia, a lo que dijo oponerse.

Destacó que ha recibido incluso amenazas de muerte, por lo que además del OFS también analizará acercamiento con el Congreso del Estado y ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) para levantar un acta de hechos.

Dicho lo anterior, aclaró que cuenta con el respaldo de los cuatro presidentes de comunidad que actualmente se encuentran en funciones para corroborar su versión.