Morena traiciona y pone fin a la 4T por Marco Antonio Ortiz Salas

En la entrega anterior señalamos que, ante los errores del gobierno federal y la polarización política en la que AMLO sumerge al país, la única alternativa es la concentración de organizaciones y colectivos democráticos en un frente amplio por encima de los discursos decimonónicos de López Obrador de ubicar a los actores políticos en liberales y conservadores. 

Esta alternativa puede ser desde ya considerada como una tercera vía, que reconoce el desgaste de MORENA dados sus conflictos internos, a la vez que denuncia los actos de corrupción de algunos funcionarios del gobierno federal, especialmente en los programas para el bienestar; pero que también rechaza al PAN y a sus aliados como MC y el desangelado PRD por no representar una oposición digna, constructiva o proactiva, sino una oposición mezquina basada en los discursos de odio y resentimiento que genera el distanciamiento del poder o la ambición de este.

El caso de Acción Nacional es entendible, juegan el papel que mejor les conviene y que en muchas elecciones les ha dado resultado, aunque cuando llegaron a ser gobierno con Fox y Calderón, sus resultados fueron desastrosos para el país. El caso del PRD es tan diferente como lamentable, hoy su auto proclamado presidente, que pasó de recaudador de “impuestos” de obra pública en la Cámara de Diputados a dirigente nacional del otrora partido más representativo de la izquierda mexicana, no hace más que fungir como vocero del panismo en su desesperación porque acepten ir en coalición, cuando menos en algunos distritos para la elección del 2021.

No obstante el ridículo electoral que haría el PRD al ir en coalición con la derecha y que nuevamente sólo beneficiará al PAN, se comienzan a encender las alertas en MORENA, cuya dirigencia sabe de sobra que encontrará un voto de castigo en la próxima elección, lo que traerá como consecuencia que se termine con el poderío que ostenta actualmente el morenismo en la Cámara de Diputados a pesar de la gris conducción de su coordinador Mario Delgado, lo que pondrá en riesgo varios de los planteamientos de López Obrador al no contar con la mayoría de escaños para el siguiente año.

Por esa razón sin mayor argumento que el de realizar “acciones conjuntas en defensa del presidente” los dirigentes de MORENA, PVEM y el eterno partido satélite PT, anunciaron la construcción de un proyecto electoral para 2021, no como un esfuerzo de estos institutos políticos de emprender una agenda que incorpore la lucha de todos los sectores de la sociedad, sino bajo el más burdo pero eficaz cálculo electoral. Incluso para Alfonso Ramírez Cuellar, dirigente nacional de MORENA, la posible coalición puede concretarse en el futuro (salvo un ingenuo pensaría que no), pero señala como un “buen inicio” la consolidación de la alianza legislativa que han mantenido en el congreso con el PT, que por cierto se da a partir de chantajes o la concesión de canongías.

Si en el 2018, ya en vísperas de la elección presidencial, nadie dudaba que Andrés Manuel López Obrador sería el ganador de la contienda, de igual manera hoy, nadie, ni el propio presidente, dudan que MORENA perderá la mayoría en la Cámara, la verdadera duda es ¿quién será capaz de lograr los escaños que perderá el partido oficial y que no se irán a la oposición?

Podemos adelantar en este espacio el destino de esos cientos de miles votos: se concentrarán en figuras y personajes más allá de los partidos políticos actuales. Los personajes, muchos de ellos sin que su objetivo sea acceder a un espacio de representación popular, comenzaron a construir esa tercera vía que va transitando por la lucha democrática desde sus comunidades. Probablemente avanzan en caminos distintos, pero sus banderas de lucha, la que les da identidad con causas justas, cualesquiera que estas sean, pronto convergerán en el proceso electoral que incia en septiembre. Ojalá no se distraiga el presidente en las intrigas palaciegas de su operador electoral, Gabriel García, la aparición de todos estos sectores, seguramente no es contra él, es por el bien de México. Ojalá no le dé por desprestigiarlos y discriminarlos cómo es su costumbre, al final de cuentas, el final de la 4T, al menos en el congreso ya comenzó.Una posdata necesaria: MORENA en la Cámara de Diputados por  instrucciones del faraón de MONSANTO Alfonso Romo, su principal operador Víctor Villalobos de SADER y con el silencio cómplice de AMLO, pone en riesgo la autonomía indígena y campesina, así como la soberanía alimentaria y riqueza biocultural de nuestro país. Plantean una reforma a la Ley Federal de Variedades Vegetales con el pretexto de que se requiere esta acción legislativa por la entrada en vigor del T–MEC. Contrario al argumento del Diputado promovente de MORENA, Eraclio Rodríguez, lo que se pretende es legalizar la siembra de semillas transgénicas y, como consecuencia, privatizar los derechos de la propiedad intelectual de las semillas y otras partes de las plantas. El movimiento campesino, ambientalista e indígena de este país, está preparado para movilizarse contra esta decisión del morenismo de traicionar el legado zapatista,  la lucha campesina y la patria misma, pero de eso abundaremos en la siguiente entrega.

POR MARCO ANTONIO ORTIZ SALAS

*SECRETARIO GENERAL DE LA COALICIÓN DE ORGANIZACIONES DEMOCRÁTICAS, URBANAS Y CAMPESINAS, CODUC A.C.