Las heladas de octubre dejaron sin cosecha a los productores de Huamantla, Ixtenco, Zitlaltepec, Tequexquitla, Tocatlán, Xaloztoc y Tlaxco
Debido a que la pandemia por Covid-19 es una enfermedad de tipo respiratorio, que ha cobrado miles de vidas, las personas han incrementado el consumo de a miel y sus derivados como propóleo y polen, productos cuya demanda aumentará en los meses de diciembre y enero.
Lo anterior lo informó Lucas Nava Flores, presidente de la Asociación de Apicultores Tlaxcala, quien señaló que “por a la pandemia ha aumentado la demanda de miel y sus derivados como el propóleo y el polen, porque son alimentos que ayudan a mantener la salud o a reconstituirla”.
Agregó que hay una medicina alternativa que se llama apiterapia que utiliza los productos de la abeja para fortalecer el cuerpo y corregir algunos problemas de salud, lo cual también ha aumentado en su demanda.
Consideró que en diciembre y enero habrá más demanda de miel por esta situación y, por eso mismo aumentarán los costos, los cuales subirán en un 20 por ciento, “pero lo importante es que haya producto”.
Nava Flores señaló que, lamentablemente un 50 por ciento de los apicultores que representa perdieron más del 90 por ciento de su producción, específicamente los de la región oriente del estado, debido a las bajas temperaturas que se registraron a inicios de octubre pasado.
“Entre el uno y tres de octubre heló y esa helada afectó a los productores de Huamantla, Ixtenco, Zitlaltepec, Tequexquitla, Tocatlán, Xaloztoc y Tlaxco, los que se ubican en la parte oriente y norte del estado.
Añadió que esa helada acabó con la floración de las flores silvestres, “ya que las abejas recolectan el polen y el néctar de las flores de acahual, mozote, tlapalozol y la perilla, pero con la helada eso se acabó, los apicultores cosechamos en la última semana de octubre y por esas condiciones climáticas no hubo miel en esa región, aunque en la parte centro y sur sí hubo cosecha”.
Especificó que como consecuencia de las heladas algunos de sus compañeros cosecharon dos litros por colmena, cuando normalmente cosechaban 30 litros, es decir, fue prácticamente una pérdida total.
“Sabemos que el gobierno del estado está tomando acciones para levantar un censo y entrevistar a los apicultores, esto con el fin de tener evidencias para generar un apoyo ante este siniestro, lo cual sí viene ayudar a los productores”.
Por lo que confió en que quienes sí cosecharon podrán abastecer el mercado interno, “porque la gente en México no la consume como alimento sino como remedio, pero finalmente es un alimento”.
Agregó que la asociación que representa, aglutina a unos 30 apicultores con unas tres mil 500 colmenas, de los cuales tuvimos una pérdida en un 50 por ciento, de los productores de la zona oriente.
Dijo que hace unos años el 95 por ciento de la producción se exportaba a la comunidad económica europea, pero ahora por la pandemia ya es necesario y la gente va desarrollando esa necesidad de poder consumir miel, polen, propóleo y jalea real.
Finalmente mencionó que los productores ya diversifican el producto para mantenerse en el mercado, ya producen miel, propóleo pomadas, shampoo, cremas, como una forma de ser más competitivos.