Es el primer convenio de este tipo que se hace en el país
Este día el gobernador del estado, Marco Antonio Mena Rodríguez firmó con sindicatos y empresarios el “Acuerdo para la defensa del empleo y el sector productivo”, en el que se comprometió, entre otras cosas a buscar financiamiento para empresas, absorber un porcentaje de impuestos sobre nómina y reforzar seguridad en empresas.
El secretario general del Sindicato Diálogo y Unidad (SDU), Eduardo Vázquez Martínez, habló del acuerdo firmado este miércoles por los trabajadores, es decir los sindicatos, el sector empresarial y el gobierno del estado, el cual abarca varios aspectos.
En entrevista con Agenda Tlaxcala, Vázquez Martínez detalló que el primero primer punto “y para mí el más importante, es el mensaje de unidad que estamos dando ante la sociedad tlaxcalteca, así como algunos temas que, de manera conjunta, tenemos que trabajar para poder alcanzar estos objetivos”.
Señaló que el gobierno del estado estableció que realizará “los compromisos económicos y administrativos que son de jurisdicción en favor de las empresas, como es el caso de absorber el 2 por ciento sobre la nómina y que dará facilidades para pagarlo después”.
Dijo que el gobierno del estado también buscará financiamiento en las mejores condiciones posibles para apoyar a las empresas que lo necesitan, “lo cual es un paso muy importante de este acuerdo, porque hay empresas que aunque les deben, pero los pagos normalmente son diferidos a dos o tres meses y, aunque en su momento produjeron la cobranza está detenida, entonces si se logra encontrar financiamiento temporal va ayudar a que las empresas sobrevivan, que es el principal objetivo después de la preservación de la salud”.
Eduardo Vázquez mencionó que en la reunión para la firma del acuerdo se habló de conservar las empresas y las fuentes de empleo “y algo muy importante a lo que se compromete el gobierno es reforzar la seguridad, primero para toda la sociedad, pero también para las empresas con actividades esenciales que están laborando cotidianamente, pues dada la circunstancia que vive el país, la seguridad se puede complicar”.
Mencionó que en el caso en el sector sindical “nos comprometemos a realizar los mejores convenios solidarios entre empresas y trabajadores para conservar la fuente de empleo y esto ayudará a mantener un clima de tranquilidad o paz laboral mientras dura la contingencia”.
“Como líder sindical a veces no me gusta tener que hacer estos convenios donde solamente el trabajador puede recibir de 70 a 80 por ciento de su salario, pero también puedo analizar con mucho cuidado la capacidad de las empresas con las que hacemos los convenios, porque también está en riesgo la permanencia de las inversiones en el estado, lo que nos ha costado mucho trabajo, primero captarlas y luego desarrollarlas, lógicamente el sector productivo y comercial también hizo compromisos como apoyar a las y los trabajadores que por su situación de vulnerabilidad no están laborando, eso es por mencionar algunas cosas”, agregó.
Destacó la voluntad de las partes involucradas en el Acuerdo para salir de esta situación de emergencia sanitaria, “que es una situación ya de crisis, por lo que el gobernador, el sector empresarial y los sindicatos hacemos un esfuerzo muy importante, tenemos conocimiento de que es el primer convenio que se firma a nivel nacional y me parece que puede ser punta de lanza para convocar a los diferentes sectores en el resto del país, para es construir un acuerdo que puede empujar en favor de sufrir lo menos posible los efectos negativos de esta pandemia”.
Indicó que este convenio es por tiempo indefinido y que habrá algunas reuniones de evaluación y seguimiento para ver los resultados concretos que se puedan tener. “hay voluntad por lo menos de los que firmamos este acuerdo, pero debemos entender que esto no se va a resolver de aquí al 30 de abril, ya viene la fase 3 de la contingencia sanitaria, en la que tal vez tenemos que reducir al mínimo la el trabajo de las empresas, aunque sean esenciales”.
Entre los que firmaron el Acuerdo, estuvieron unos 30 o 40 representantes de centrales obreras, como el caso de la CROC, de sectores empresarial y cámaras como la Coparmex y Canacintra, entre otros.