El campo tlaxcalteca ha registrado pérdidas por la sequía y las lluvias atípicas, en algunos municipios como Cuapiaxtla, Tocatlán, Panotla, Natívitas, Tenancingo, Huactzinco, donde se han presentado granizadas.

En entrevista para agendatlaxcala el dirigente de la Coalición de Organizaciones Democráticas Urbano Campesinas (Coduc), Alejandro Martínez Hernández, señaló que si ha habido estragos, dependiendo del tamaño del granizo y llegan a ser del 80 al 100 por ciento en cultivos como tomate, jitomate o durazno, mientras que para maíz es de un 50 por ciento, por lo que ya no se logra la cosecha, asentó Martínez Hernández.

Po otra parte, la sequía también ha afectado diferentes municipios del estado como son Tequexquitla, Cuapiaxtla, Atltzayanca, Benito Juárez y Atlangatepec, haciendo estragos a la producción.

Esto se suma a lo tarde que han entregado fertilizante el gobierno del estado y el gobierno federal, bajo el argumento de la pandemia, por lo que en algunos lugares no se había abonado los cultivos, recalcó el dirigente de la Coduc.

Bajo la realidad que se vive por la pandemia y los estragos económicos que ha dejado, Martínez Hernández sostuvo que los únicos que pueden rescatar a la ciudad y a las grandes urbes son los pequeños propietarios, pues las grandes empresas no van a venir a salvar o ser el detonante económico, pues los pequeños productores son los que dan trabajo a dos o tres personas, lo que suma una importante cantidad de la población.

A pesar de ello, a los pequeños productores no se les apoya, pues presidentes municipales van y vienen pero no hay apoyo, mientras que unos dicen que hacen entregas masivas de abono orgánico, pero sólo entregan tres o cuatro costales, cuando para una hectárea se requieren más de cuatro toneladas de abono orgánico, declaró el dirigente de la Coduc.

Además, señaló que el fertilizante ni gratis ni vendido ni nada, porque el gobierno del estado se preparó para apoyar a 13 mil productores, por lo que este año 23 mil se han quedado sin fertilizante.

También enfatizó que ellos como organización han entregado apoyo de biofertilizantes foliares, los cuales vale la pena probar, siempre y cuando se adicionen al inicio  del ciclo, preferentemente con la siembra.

“Los biofertilizantes son buenos claro que sí, pero si los aplicamos en tiempo, si sembramos en marzo o abril y nos los entregan por noviembre o diciembre, ya no sacas al buey de la barranca”, concluyó.