INGREDIENTES
Porciones
4
Ingredientes para la pizza
12 hojas de arúgula
100 gramos de jamón serrano
aceite de oliva al gusto
12 hojas de albahaca fresca
200 gramos de queso mozzarella
Ingredientes para la salsa
pimienta negra molida al gusto
sal al gusto
aceite de oliva al gusto
1 trozo de canela entera
10 hojas de albahaca fresca
1 diente de ajo
8 piezas de jitomate guaje
Ingredientes para la masa
2/3 taza de agua tibia
2 cucharadas de aceite de oliva
11 gramos de levadura seca instantánea
1/2 cucharita de sal
1 3/4 tazas de harina de trigo
PREPARACIÓN
Para preparar la masa; cernir la harina y la sal con un cernidor o colador y colocarla en un tazón. Espolvorear la levadura encima. Hacer un pequeño pozo en el centro de la harina hasta que se vea el fondo del tazón, colocar en el centro el agua tibia y el aceite. Mezclar todo bien hasta obtener una masa blanda. Formar una bola con la masa y colocarla dentro de un tazón limpio y seco. Cubrir el tazón con un paño limpio y húmedo y dejarla reposar durante 60 minutos hasta que duplique su tamaño.
Para preparar la salsa; cortar los jitomates en cuartos y picar finamente el ajo. Sofreír el ajo picado en un sartén con aceite caliente durante 1 minuto, agregar los jitomates cortados en cuartos y continuar cociendo 5 minutos hasta que cambien de color a un rojo más intenso. Sazonar con sal y pimienta, agregar las hojas de albahaca y el trozo de canela. Continuar cociendo a fuego medio, meneando de vez en cuando hasta que la salsa reduzca y quede espesa. Rectificar sazón.
Para armar las pizzas; dividir la masa a la mitad y formar dos bolas, una para cada pizza. Con cuidado, colocar la masa sobre la charola para horno untada con aceite de oliva y extender con las yemas de los dedos hasta que tenga ½ cm de grosor. Dejar el borde una poco más grueso.
Untar salsa de jitomate sobre la masa utilizando una cuchara y colocar sobre ella el queso mozzarella en rodajas y el jamón serrano.
Hornear en horno previamente calentado a 400°F (200°C) durante 10 o 15 minutos hasta que la masa esté dorada y el queso se vea derretido. Servir decorado con hojas de arúgula.
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