Ante la inconformidad que mantienen maestros y trabajadores de los tres poderes del estado y municipios, el gobierno del estado mantiene sitiado prácticamente el zócalo de la capital del estado de Tlaxcala con un gran despliegue policiaco, para evitar que inconformes realicen un plantón permanente.

Decenas de patrullas y elementos policíacos están apostados en la Plaza de la Constitución lo que ha generado críticas. 

"Las patrullas y los policías deben estar resguardando la seguridad de los ciudadanos, haciendo rondines en lugar de cuidar el parque y edifiicios", señaló Cesar E. quien circulaba por el primer cuadro de la ciudad.

Con la presencia de los elementos policíacos se busca inhibir a los manifestantes para que claudiquen en su intento de realizar movilizaciones frente a palacio de gobierno un plaen exigencia a que les brinden el servicio de salud establecido en su contrato laboral.