Desde la Sociología Columna por Ana Dayani Jimenez Aguirre
Tal como Pierre Bourdieu (1984, recuperado de Ritzer, 2018) menciona al habitus refiriéndose a las “estructuras sociales internalizadas y encarnadas" a partir de dichas estructuras, se conciben las formas en las que el individuo percibe el mundo. El habitus no es el mismo para todos los sujetos a menos que vivan en contextos similares, según Bourdieu existe una multitud de habitus, lo cual significa que no se vive en un mundo uniforme.
Los resultados que obtuve al aplicar encuestas a la muestra determinada en el municipio de Santa Ana Chiautempan, Tlaxcala, y haciendo una comparación con los datos estadísticos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT, 2020) pude obtener resultados muy similares en los que se concluyó que el 70% de la población adulta tenía obesidad debido a factores económicos, laborales y sociales que resultaban en una constante problemática a causa de esta “estructura estructuradora” (Bourdieu, 1984).
Entonces, si me preguntan ¿Cómo creo que la sociología aporta valor a mis comunidades inmediatas? Como ya lo he mencionado, la sociología me ha dado el medio para ayudar a mi comunidad, ya que usando las herramientas metodológicas, he podido realizar investigaciones que me acerquen a la realidad de los problemas que aquejan a mi comunidad, el valor lo encontré cuando concluí que se puede llegar a armar un diagnóstico, emplear medidas para disminuir el impacto sobre los sujetos inmersos en esa realidad o hacer proyecciones que puedan ayudar a los servidores públicos a establecer medidas en pro de la comunidad, e incluso, contribuir a la creación de políticas públicas.
¿En qué sectores profesionales la sociología tiene la oportunidad de marcar una diferencia valiosa? En México, no podría decir con datos específicos en qu sectores trabajan la mayoría de los sociólogos, pero de acuerdo con conversaciones ocasionales con conocidos egresados y profesores, la percepción me indica que,
en su mayoría los sociólogos nos dedicamos a la docencia o a la investigación académica, tal vez por la limitada oportunidad de ofertas laborales en entornos como la política, las empresas privadas y la preferencia que se le da a los psicólogos y a los trabajadores sociales. Sé que la sociología tiene la virtud de poder realizar trabajo interdisciplinario, pues se conoce una amplia variedad de ramas de la sociología, por ejemplo, en la historia, en la antropología, o incluso, en la medicina, sin embargo, es preciso mencionar que existen puestos en donde el sociólogo puede desempeñar un trabajo impresionante.
Un sector importante en donde yo considero que la sociología debería de estar sería como funcionarios en el gobierno, sea local o federal, los sociólogos deberían de ocupar puestos como asesores políticos, diputados, senadores, Magistrados, presidentes municipales y ¿por qué no? Ser presidentes de la nación. Con ello no niego que ya existan sociólogos en estos puestos, pero sé muy bien que es reducida la oportunidad que tenemos para acceder a este sector laboral, al igual, sé que los sociólogos tenemos los conocimientos suficientes para abordar las problemáticas emergentes desde una perspectiva amplia y objetiva, lamentablemente en México reconozco que la sociología es de las licenciaturas menos apreciadas y donde la mayoría de la población desconoce su utilidad.
Sin motivos suficientes para extender más este ensayo, contestaré la siguiente pregunta: ¿Cómo podrían las teorías sociológicas y los métodos de investigación ayudar a impulsar un cambio positivo en el mundo que nos rodea? De acuerdo con Monje (2011) la teoría es una generalización abstracta que presenta una explicación sistémica acerca de las relaciones entre fenómenos, además las teorías incorporan principios para explicar predecir, y controlar fenómenos. Recordando mis clases de metodología de la investigación y tomando en cuenta lo que define Monje como teoría, puedo decir que el mundo está en constante cambio, por tal motivo, me resulta curioso que las teorías estén cuidadosamente construidas de tal forma que lo que postuló Goffman el siglo pasado sobre el interaccionismo simbólico sea una teoría que fácilmente puede ser adecuada para un fenómeno social del 2024.
Esa es una virtud que poseen las teorías y que nos sirven de referente para enfrentarnos como sociólogos a las problemáticas de nuestra realidad inmediata. Tenemos la capacidad de compartir estos conocimientos con los actores y usar teorías que nos marcan alternativas para interpretar y cambiar al mundo.
Finalmente, la sociología es importante por el simple hecho de ser una disciplina que estudia a la sociedad y sus comportamientos, una disciplina que encuentra una gran riqueza en lo que los sujetos puedan expresar tanto en conjunto como individualmente, que se cuestiona todo el tiempo el curso de los hechos que muchas veces pasan desapercibidos, que analiza y aporta soluciones concretas e imparciales, que rompe con esquemas trazados, también es una ciencia que incomoda con la verdad. Mi relato personal demuestra que todo lo que vemos a nuestro alrededor es sociología esperando a que le otorguemos el valor que tanto necesita para dar un paso más, tratando de tocar lo que los sociólogos denominamos lo utópico.