Columna por: J. Fernando Martínez M.
GOBERNADOR CONSTITUCIONAL DEL ESTADO (DEL 15 DE ENERO DE 1993 AL 15 DE ENERO DE 1999). MEDIANTE DECRETO NÚMERO 59 DE FECHA 12 DE JULIO DE 1994, EL CONGRESO DEL ESTADO DE TLAXCALA REFORMA EL ARTÍCULO 10 DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO, EN EL CUAL SE CREA EL INSTITUTO ELECTORAL DE TLAXCALA.
Nació en la Ciudad de Apizaco, Tlaxcala el 3 de mayo de 1942. En ese año, Tlaxcala fue favorecida con la instalación de 2 Misiones Culturales más, las cuales prestaron sus servicios en las comunidades de Papalotla y la Magdalena Tlaltelulco, precisamente fue en este lapso cuando se expidió la Ley que establecía la Campaña Nacional contra el Analfabetismo, siendo el Secretario de Educación Pública del Gobierno de México: Jaime Torres Bodet. En ese mismo año Joaquín Cisneros Molina fue nombrado titular del Departamento Consultivo de la Dirección Jurídica de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
También se llevaba a cabo la tercera remodelación del teatro Xicoténcatl, ya que éste inmueble registró un incendio que acabó con la techumbre, por lo cual permaneció cerrado durante tres años.
Gobernaba la Entidad Manuel Santillán, a cuyo Gobierno se le acusaba de haber estado asesinando a líderes comunitarios como lo expresaba el Diputado Lima J. Jesús quien pidió el uso de la palabra al Presidente de la Cámara de Diputados para expresar: “El 6 de enero de 1942, fueron asesinados Alberto Vega y un individuo de nombre Moisés por Silvestre Lara, segundo comandante de la policía del Estado. El 1o. de febrero de 1942, fue asesinado el señor Tomás López, vecino de Zacatelco, por la policía del Estado. El mismo día fue herido en el brazo, por la misma policía, el señor Andrés Abriz, también de Zacatelco. El 25 de enero, fue asesinado en la plaza pública de Zacatelco el campesino Albino Tlapanco, vecino de San Pablo del Monte. El 9 de noviembre, fue asesinado por la policía del Estado el leñador Pánfilo Pérez Sánchez, vecino de Contla. El señor Arcadio Romero fue asesinado también por la policía en Tenancingo. Una investigación minuciosa podrá arrojar mayor número de atentados contra la vida de los campesinos. Si nosotros seguimos esta lista, como en sesión secreta se va a tratar, verán ustedes que el Gobierno de Tlaxcala no sólo está asesinando y hasta desconociendo el régimen constitucional del Estado, sino también abusando en todos las órdenes de una influencia política para pretender presionar en las próximas elecciones constitucionales en favor del señor Farfán.
Quisiera rogar a ustedes que se consigne al Gran Jurado al señor Gobernador Santillán y que, de una vez por todas, apliquen un castigo severo y que se busque la forma que la ley prevé para que este señor sea sustituido en el Estado de Tlaxcala”, lo anterior en base al Diario de los Debates de la Cámara de Diputados Federal.
Mientras todo ello ocurría, José Antonio Cruz Álvarez Lima nacía, siendo hijo de Jacobo Álvarez Piñan (inmigrante español) y la señora Catalina Lima Paredes. Su abuelo Gabriel Lima se estableció en Huamantla a principios del siglo XX. Vivió el estallido revolucionario y se incorporó a las tareas de la administración pública municipal en el año de 1918, como Síndico en Huamantla; y en 1920 fue electo Diputado al Congreso del Estado.
El matrimonio Álvarez Lima fijó su residencia en Apizaco, estableciendo negocios como ‘la distribuidora de llantas de Apizaco’, ‘el cine Apizaco’ y ‘el correo español’ y fundaron la ‘Cámara de Comercio’ y el ‘Club de Leones’ de la Ciudad Rielera.
José Antonio Álvarez Lima estudió en la escuela primaria ‘Fray Pedro de Gante’, posteriormente fue inscrito en la secundaria ‘Héroes de Nacozari’. Álvarez Lima hizo sus estudios de preparatoria en el Instituto Tecnológico de Monterrey, N.L. y en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, de 1960 a 1965.
Álvarez Lima fue alumno destacado de Enrique González Pedrero (aquel político, diplomático, intelectual, escritor, editor, miembro del Partido de la Revolución Democrática, y que anteriormente perteneció al Partido Revolucionario Institucional, Ente político que lo llevó a ser Senador, Gobernador de Tabasco y Director del Fondo de Cultura Económica) y de Pablo González Casanova (el destacado sociólogo y crítico mexicano, condecorado por la Unesco en 2003, con el Premio Internacional José Martí -por su defensa de la identidad de los pueblos indígenas de América Latina- y quien fungió como Director de la Escuela Nacional de Ciencias Políticas y Sociales de 1957 a 1965).
“Apoya a Emilio Sánchez Piedras quien, desde la Tribuna de la Cámara de Diputados, defiende la política internacional de México. Como muchos estudiantes de su generación, Álvarez lima se educó en las aulas y en las oficinas del Gobierno”, se destaca en la biografía oficial de la monografía del municipio de Apizaco.
De 1960 a 1962, J.A.A.L., trabajó como analista del Departamento de Promociones Sociales de la empresa paraestatal CEIMSA. En 1945, un grupo de empresarios conscientes de la necesidad de aumentar la oferta de leche en la Ciudad de México, constituyeron la empresa “Lechería Nacional, S.A. de C.V.”. Para el año de 1950, la Compañía Exportadora e Importadora Mexicana, S.A. (CEIMSA) asumió las funciones de elaboración, distribución y venta de leche importada que se reconstituía en el país, asegurando que ésta fuera de buena calidad y a precios accesibles para la población de escasos recursos.
En 1954, comenzó a operar en el municipio de Tlalnepantla de Baz, Estado de México, la que hoy es la Gerencia Metropolitana Norte. Esta planta produce el mayor volumen de lácteo de todas las unidades industriales que conforman Liconsa; inicialmente tenía la capacidad para rehidratar 30 mil litros diarios de leche, y llegó a tener la capacidad para producir un millón 230 mil litros de leche al día.
Por disposición del Gobierno Federal, en 1961 se constituyó la Compañía Rehidratadora de Leche CEIMSA, S.A.; en 1963, esta empresa cambió su denominación por la de Compañía Rehidratadora de Leche Conasupo, S.A. Posteriormente, en 1972 se modificó para quedar como Leche Industrializada Conasupo, S.A. de C.V. A partir de 1995, con la resectorización de la Secretaría de Desarrollo Social cambió su denominación a Liconsa, S.A. de C.V.
En 1964, J.A.A.L., se afilió formalmente al Partido Revolucionario Institucional (PRI), iniciando una destacada militancia en esa organización política.
Álvarez Lima combinó las actividades laborales y políticas con la docencia universitaria, fue invitado en 1966 por el Director de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, para impartir la cátedra de “Sociología de México”. La Escuela Nacional de Arquitectura lo llama para impartir la cátedra de “Evolución de México”, en 1967. La Escuela de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, lo invitó a impartir las cátedras de: “Historia de las Ideas Políticas” y de “Política y Gobierno en América Latina”, en el periodo 1968-1970. En la Universidad Iberoamericana, fue profesor de “Sociedad y Política de México”. Ganó por oposición la cátedra de “Formación Social Mexicana III”, en su propia escuela profesional (UNAM). En 1966, fue titular del Departamento del Servicio Social de Pasantes, en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. De 1969 a 1970, fue Subdirector de Acción Social de la UNAM. También fue Docente de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla y Docente de secundaria, en 1960. Docente adjunto en la UNAM, en 1964. Docente del Instituto Nacional de Administración Pública, en 1980. En este mismo año, fue Presidente del Consejo Directivo del Colegio Nacional de Ciencias Políticas.
En 1970, el candidato a la Presidencia de la República, Luís Echeverría Álvarez, lo invitó a una gira por el Estado de Tlaxcala. En 1971, asume la Coordinación de la Dirección de Acción Cívica y Orientación Política del Comité Ejecutivo Nacional del PRI y participa en la fundación del Instituto de Capacitación Política del PRI (ICAP). En esos años, fue nombrado Delegado Especial de la Confederación Nacional Campesina (CNC) en varias Entidades Federativas del país.
De 1972 a 1975, J.A.A.L., ocupa la Secretaría Particular del Secretario General del CEN del PRI, quien era Enrique González Pedrero, siendo Presidente Nacional: Jesús Reyes Heroles (el ideólogo del PRI). Como se recordará, Andrés Manuel López Obrador en 1976 se incorporó al PRI. Su primer cargo fue director del Centro de Estudios Políticos, Económicos y Sociales (CEPES), luego coordinador general de Consultas Populares de la campaña de Enrique González Pedrero a la gubernatura de Tabasco. De estos tiempos data la relación entre AMLO, J.A.A.L., y González Pedrero.
De hecho, en el periódico nacional ‘Crónica’ con fecha 2 de abril de 2020 se describe que la “Logia número 8 de New York, bajo el Rito Escocés, Andrés Manuel fue iniciado bajo el manto protector de Enrique González Pedrero”, liga que por cierto ya no está disponible.
J.A.A.L., como Secretario Particular del Secretario General del CEN del PRI, participó como ponente en la reunión del Plan Básico de Gobierno, con la presencia del candidato del PRI a la Presidencia de la República, José López Portillo. Su trabajo ‘Hacia un nuevo modelo de desarrollo’ leído en la ciudad de Tlaxcala, es comentado en reiteradas ocasiones.
J.A.A.L., en 1973, fue Director de noticias del Canal 13. En 1976, fue Subdirector de Subdelegaciones Federales de la SEP. En 1977, fue Subdirector de Operaciones del Canal 11. En 1978, Álvarez fue Director de Radio Educación. En 1979, ocupa la Presidencia de la Comisión de Medios de Comunicación del Instituto de Estudios Políticos Económicos y Sociales y es nombrado miembro de la Comisión Editorial del mismo IEPES. Más tarde, se le nombró Director de la revista ‘La República’, órgano oficial del PRI.
En 1982 y hasta 1985, sus paisanos ‘lo hacen’ Diputado Federal a la LII Legislatura por el Primer Distrito de Tlaxcala (gobernaba Tulio Hernández Gómez). Nuevamente el CEN de PRI lo comisionó como Delegado del Partido en el Estado de Tabasco, de 1985 a1987.
En 1988, fue Director del Instituto Mexicano de Televisión: IMEVISION. La Secretaría de Relaciones Exteriores lo nombra Embajador de México en Colombia, en 1985. En 1987, es nombrado Subsecretario de Radio y Televisión del PRI.
En 1991 – 1992, fue Senador de la República por el Estado de Tlaxcala, en LV Legislatura. Como dato curioso, en marzo de 1988, Álvaro Salazar Lozano renunció como Secretario de Gobierno en el sexenio de Beatriz Paredes Rangel, pues había sido postulado como candidato a Senador por el PRI, pero para un periodo de 3 años, así lo establecía la ley en ese momento. En esos años de 1988, estaba por orquestarse el fraude de Carlos Salinas de Gortari frente a Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano. En ese año, se renovó la Cámara de Diputados Federales y la Cámara de Senadores. En el caso de la Cámara Alta que debería hacer sido para el periodo 1988 – 1994, se dividió en 2 lapsos: de 1988 a 1991 y de 1991 a 1994. En el caso de la Cámara Baja fue normal, es decir, para el periodo de 1988 – 1991. Luego entonces Álvaro Salazar Lozano fue Senador para el periodo de 1988 a 1991. Y luego José Antonio Álvarez Lima fue senador para el periodo de 1991 a 1994, mientras que el recién salido de ser Senador: Salazar Lozano fue postulado para ser Diputado Federal para el periodo de 1991 a 1994. Cabe resaltar que Álvarez Lima no terminó su periodo como Senador pues fue elegido como candidato a Gobernador.
Para el segundo semestre de 1992, J.A.A.L., hace campaña para ser Gobernador de Tlaxcala. Y el 15 de enero de 1993, toma posesión como Gobernador para el periodo 1993 -1999.
Debemos recordar que, ya para 1986, Álvarez Lima deseaba ser Gobernador. De Beatriz Paredes Rangél, se cuenta, que antes de ser electa Gobernadora, es decir, en el año 1986 fue en busca del entonces Presidente de la República: Miguel de la Madrid Hurtado ya que el aparato partidista había decidido que José Antonio Álvarez Lima sería para entonces el abanderado; ella se opuso y finalmente fue seleccionada, quizás ese sea el motivo de la rivalidad política con el ex Gobernador que se acrecentó más, debido a que ella intentó, en dos ocasiones, imponer como Gobernador al ex Secretario de Investigación Científica de la UAT; Álvaro Salazar Lozano. Pero solo es una suposición, pues ella misma manifestó a la Prensa que nunca pretendió extender su Gobierno “tras bambalinas”, que si lo hubiera querido: hubiera impuesto a Salazar Lozano.
El columnista Felipe Moreno escribiría para un diario nacional que: “José Antonio Álvarez Lima, ex Senador por Tlaxcala y conocido en el medio político como ‘la perica’. La ‘perica’ siempre fue el puntero en la sucesión de Beatriz Paredes Rangel, pues el ex Embajador de México en Colombia, siempre fue visto como ‘salinista’. Se comentaba en aquellos días en Tlaxcala que la ahora ex Gobernadora y ex Secretaria General del PRI no quería que José Antonio Álvarez Lima la relevara en la gubernatura. Como Gobernadora podía influir un poquito y meterle el pie a ‘la perica’, pero como Secretaría General del PRI, ‘se ampliaban esas posibilidades’. Las piedritas que pudieron volverse rocas, no fueron tan sólidas para frenar a José Antonio Álvarez Lima en el camino.
La mano de Otto Granados, ex súper asesor de Arturo Montiel en el Gobierno del Estado de México; fue definitiva. Los dos, tanto Beatriz como José Antonio Álvarez Lima, son egresados de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, son contemporáneos, no son amigos y no porque Beatriz haya estudiado sociología y no ciencia política”.
Carlos Salinas y José Antonio Álvarez Lima, han mantenido desde hace muchos años una relación amistosa, desde que el ex Embajador de México en Portugal inició su formación política en el tricolor al lado de Enrique González Pedrero, y miembro del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Con el apoyo de Salinas de Gortari, Álvarez Lima fue Director General de la desaparecida Imevisión y más tarde Embajador de México en Colombia. Una vez que Carlos Salinas arribó al poder, Álvarez Lima -quien carecía de arraigo político entre la comunidad tlaxcalteca- manifestó al Presidente, a su amigo, su interés por ser Gobernador de Tlaxcala. Y así, Salinas primero hizo a Álvarez Lima Senador y luego Gobernador.
Cuando Álvarez Lima fue designado candidato a la vieja Casona de Xicohténcatl -sin el aval de Paredes Rangel- éste tuvo que apoyarse de la campaña que, a la par realizaba Héctor Ortiz Ortiz rumbo a la Cámara de Diputados. Solo así, dicen algunos políticos, podía tener gente en sus mítines.
Ya como Senador de la República por el PRI; Álvarez Lima no quitó el dedo del renglón y volvió a manifestarle a Carlos Salinas sus aspiraciones por ser el candidato del tricolor a la gubernatura de Tlaxcala”, hasta aquí la columna de Felipe Moreno.
Álvarez Lima gobernó del 15 de enero de 1993 al 15 de enero de 1999. Fabián Robles Medrano manifestó en una columna para un medio local que, durante el Gobierno de Álvarez Lima, “Federico Barbosa Gutiérrez, entonces Secretario de Gobierno, develó un panorama hasta entonces desconocido o escondido por las autoridades: ‘Tlaxcala ya no es el Estado tan tranquilo que antes era; aquí ya hay tráfico de personas, de armas, alcohol, etc…’ Pero lo sorprendente de aquellas declaraciones hechas a este reportero y a Valentín Ahuactzi Ávila, entonces corresponsal de Excélsior, no fue eso, sino lo que enseguida nos dijo el segundo hombre en importancia del sexenio de José Antonio Álvarez: una organización (ilícita) había ofrecido comprar el centro vacacional ‘La Trinidad’ para usar el helipuerto como centro de operaciones... Aquella entrevista ‘banquetera’, obtenida al término de un acto de la Central Campesina Independiente en el auditorio del PRI en Apizaco, no tuvo mayor trascendencia”.
Víctor López Tamayo en su columna ‘El Búnker’ en el ‘Cuarto de Guerra’ del 18 de julio de 2011, explica que: José Antonio Álvarez “también manejó el PRI a su antojo, e incluso lo convirtió una extensión de su Gobierno. Colocó en la Presidencia a Fermín Sánchez Varela y a Rubén Flores Leal, pero el verdadero dirigente fue el veracruzano Carlos Brito. La llegada de Carlos Brito como Delegado del CEN del PRI, fue el primer espacio que solicitó Álvarez Lima cuando fue destapado por el entonces Presidente Carlos Salinas de Gortari como candidato a la gubernatura. Pidió esa posición porque no confiaba en Beatriz Paredes”.
José Antonio Álvarez después de su mandato se retira de los reflectores políticos, no sin antes sentenciar que un buen ex Gobernador “es aquel que no se mete en la política del sucesor”. Ya retirado de su mandato fallece su esposa. En 2004, vuelve a perder el PRI la gubernatura, con Héctor Ortiz Ortiz, lapso en el que Álvarez se manifiesta apartidista y dispuesto a regresar a las filas sociales.
Por otro lado, Jorge Luis Cuevas en su columna ‘Segmentos’ del 28 de octubre de 2008 detalla: “Ya en el sexenio del priísta José Antonio Álvarez, Tlaxcala fue reconocido como un Estado con estabilidad social, seguro y mágico. Por estas características fue elegido para que el entonces Presidente de los Estados Unidos, William Jefferson Clinton y el Presidente de México, Ernesto Zedillo, junto con sus respectivas esposas, visitaran la Entidad en la primera semana del mes de mayo de 1997. ¿Por qué Tlaxcala? Preguntaban reporteros nacionales e internacionales. El entonces Gobernador contestó que, en parte por la estabilidad social y la seguridad. Durante la administración de José Antonio Álvarez también visitaron Tlaxcala los Reyes de España, después de eso, el sexenio del perredista de Sánchez Anaya pasó inadvertido en cuanto a encuentros internacionales”.
Vicente Sáiz Tejero en su columna ‘Tiempos de Democracia’ publicado el 26 de mayo de 2008, en ‘El Sol de Tlaxcala’ destaca: “Álvarez Lima advirtió con anticipación la inevitabilidad de la muerte del antiguo régimen político. Intuyó que más valía manejar los impulsos democratizantes de los tlaxcaltecas que resistirse a ellos. Ante las presiones de una oposición incipientemente organizada, abrió en forma paulatina y controlada válvulas de alivio para que los adversarios del Partido dominante pudieran, por fin, expresarse sin ninguna cortapisa. Redactó e hizo aprobar un Código Electoral en 1994 que, aunque pleno de candados a favor del oficialismo, proporcionaba ya un financiamiento equitativo a los partidos y daba acceso igualitario a los medios de comunicación del Gobierno. No obstante, su elevado costo, accedió también a financiar el primer padrón con fotografía de la historia. Y, lo más importante, a nadie persiguió ni hostigó por sus ideas.
Hombre forjado en el sistema, Álvarez Lima calculaba con frialdad el alcance de cada uno de los pasos que daba hacia adelante en función de un supuesto en el que siempre creyó: que su Partido, el PRI, no corría ni remotamente el riesgo de perder los comicios en los que se elegiría a su sucesor. Contrariamente a lo que suponen sus detractores, Álvarez Lima nunca dudó del triunfo tricolor. En eso se equivocó.
José Antonio Álvarez quiso democratizar Tlaxcala sin perder el poder. La derrota canceló un futuro que, a José Antonio Álvarez se le prometía harto halagüeño. Pero no se culpe a José Antonio Álvarez; el ‘huamantleco’ actuó de conformidad con los tiempos que iba marcando el devenir político de México. A estas alturas del siglo XXI, debiera ser claro para todos que hubiera sido una gran torpeza oponerse al avance de la democracia en Tlaxcala. José Antonio Álvarez no lo hizo, aún a sabiendas del precio que eventualmente podría pagar por ello”, deduce Sáiz Tejero.
A todo esto, es de recordar que, “en la elección de 1992, José Antonio Álvarez resulta electo como Gobernador y se compromete a hacer una profunda reforma electoral en el Estado, dada la poca participación de los ciudadanos en las elecciones que apenas alcanzó el 41% del total de los electores registrados en el Padrón Electoral.
El 15 de enero de 1993, José Antonio Álvarez convoca a los actores políticos y ciudadanos, a participar en la reforma electoral; ésta convocatoria fue bien recibida por los Partidos Políticos, quienes realizaron foros de consulta en diversas partes del Estado, instalándose mesas de trabajo en municipios como Apizaco, Huamantla, Zacatelco, Calpulalpan, San Pablo del Monte, y mediante Decreto número 59 de fecha 12 de julio de 1994, el Congreso del Estado de Tlaxcala reforma el artículo 10 de la Constitución Política del Estado en el cual se crea el Instituto Electoral de Tlaxcala, órgano que tendría a su cargo la dirección, organización y vigilancia de las elecciones en el Estado, debido a ésta reforma los Diputados del Congreso de Estado aprobaron en su Decreto número 60 publicado en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado de fecha 25 de julio de 1994, el Código Electoral del Estado de Tlaxcala, lo cual fue un gran avance en nuestro Estado”, se destaca en la reseña histórica oficial del Instituto Estatal Electoral. “La moneda está en el aire”, decía Álvarez Lima.
En la columna política “off the record…”, escrita por Javier Conde Gutiérrez describe: “Pero no hay que dejar pasar la ‘flamante’ deuda que generó el Gobierno de José Antonio Álvarez, para cumplir los ‘caprichos’ de maestros en los años 90´s. El priísta se vio obligado políticamente a resolver el asunto porque simplemente los mentores lo pusieron en jaque al grado de que su investidura estaba en riego. Como se recordará José Antonio Álvarez le heredó una deuda a la administración de Alfonso Sánchez Anaya de alrededor de 400 millones de pesos, para poder cubrir el pliego petitorio de los mentores que lograron lujos como 90 días de aguinaldo y hasta que el Gobierno obsequiara diez vehículos para el ‘Día del Maestro’, entre otras cosas. El déficit que ha generado el sector educativo no lo ha podido resolver la federación mucho menos el Gobierno del Estado y que crece cada año, para poder cumplir con las prestaciones del magisterio tlaxcalteca, que desgraciadamente no ha sabido corresponder en términos de la calidad educativa que se requiere el Estado. Así que tanto José Antonio Álvarez tiene una cuenta pendiente con el pueblo de Tlaxcala, porque simplemente las finanzas del Estado permanecían sanas, pero el cúmulo de errores en el ámbito político han propiciado que Tlaxcala tenga deuda que parece impagable”, hasta aquí la columna de Javier Conde Gutiérrez.
Jorge González Ramos en su columna ‘La Agenda’ de ‘El Sol de Tlaxcala’ menciona: “Ayer, los priístas reunidos en ‘El Calinda’ deliberaron crudamente sobre cuáles fueron las razones por las que fue arrebatado el triunfo legítimo en las urnas a su Partido. Pero también cundió el repudio por Antonio Álvarez Lima, de quien lo menos que se pidió fue juicio político y la intervención de la Comisión de Honor y Justicia para expulsarlo, como lo merecen los traidores. Amado Flores Báez conmocionó al auditorio de dicho hotel, cuando en su turno se fue sobre la mediocre imagen de Álvarez Lima. Poco tiempo se requirió para que otro priísta de cepa, como lo es Álvaro Salazar, afirmara que ‘sólo una mente perversa como la del ex Gobernador – en referencia a Álvarez Lima- fue capaz de enviar una iniciativa de reforma al Congreso para afianzar el triunfo de la oposición, mediante la suma de los votos obtenidos por varios partidos aliados’, sentenciaba el ex alcalde huamantleco”.
Miguel Ángel Granados Chapa en su artículo “Tripartidismo en Tlaxcala” destaca: “José Antonio Álvarez fue el último Gobernador de la normalidad priísta en Tlaxcala. En 1992, obtuvo el 85.7 por ciento de los votos mientras que el PRD alcanzó únicamente el 6.8 por ciento; y el PAN nada, pues ni siquiera presentó candidato. En las siguientes elecciones el panorama se modificó radicalmente, al grado de que el Partido dominante casi único que hizo ganar a José Antonio Álvarez con ese porcentaje abrumador, quince años después, en 2007, no ganó un solo Distrito en las elecciones legislativas intermedias”.
“José Antonio Álvarez escribe libre de amarras que imponen las ideologías”, dijo Sáiz Tejero y añadió que ‘el de ‘Huamantla’ se atiene a lo que le dicta su libérrimo albedrío, entendido éste como la potestad de obrar por reflexión y elección’.
En una columna escrita por José Antonio Álvarez Lima respecto al nuevo embajador Wayne expresó “le deseamos éxito al embajador Wayne en su misión. Desafortunadamente el exótico México de hoy, lleno de simpática corrupción y colorida violencia hará que el embajador extrañe muy poco su reciente aventura afgana. Bienvenido, entonces, al caótico desmadre mexicano”.
Mario Campos (de Antena Radio) entrevistó a José A. Álvarez Lima el primero de junio 2009, a quien le manifestó: “Yo creo que el PRI como partido de oposición, pues siempre puede criticar al Gobierno y esto es siempre una posición cómoda. Sin embargo, no está en los genes del PRI el actuar como oposición por eso es que le ha costado trabajo criticar, ser oposición. Más bien ha preferido irse por las ramas creyendo que los debates sean sobre ideas de altura y tratar de evadir cuáles son los temas principales que le interesan a los ciudadanos porque de alguna manera si hablamos de inseguridad, corrupción, desempleo, devaluación, impunidad, partidocracia pues es son asuntos de los cuáles ellos son corresponsables después de haber gobernado durante 70 años. De tal manera que el debate que se anuncia entre el PRI y el PAN puede ser interesante si el PRI se decide a atacar a fondo al Gobierno como debe hacerlo cualquier partido de oposición y al mismo tiempo el PAN se defiende también desnudando todos los inconvenientes que el PRI llevó a cabo durante 70 años de gobierno. Esto sí animaría al circo electoral…
Hoy comento en mi artículo de ‘Milenio’ que desde la Revolución Francesa la humanidad aprendió que nunca gobiernan las ideas, que los que gobiernan son hombres de carne y hueso, pues quizá inspirados por sus ideas, pero sobre todo dominados por sus pasiones y sus intereses, por su biografía. Entonces cuando algu