A casi 2 años de su implementación el decreto para inhibir el consumo de alcohol entre la población tlaxcalteca no se cumple, toda vez que la ingesta de bebidas alcohólicas en plena calle sigue siendo una escena cotidiana en distintos puntos del territorio, aún cuando esta práctica está prohibida. 

Y es que en el decreto se establece de manera puntual la prohibición de ingerir alcohol en la vía pública, incluso se establece como sanción un arresto administrativo de hasta 36 horas y multa de 20 unidades de medida y actualización. Mientras que la venta de bebidas alcohólicas a menores de edad se establece como clausura definitiva del establecimiento. 

Dentro del mismo decreto se establecen horarios para el funcionamiento de bares y expendios de alcohol, se establece también la prohibición de la venta de la venta y consumo de bebidas alcohólicas en campos deportivos en un radio no inferior a 150 metros y en caso de incumplimiento se procederá a la clausura y decomiso de los productos, además de las respectivas sanciones administrativas.

Cabe recordar que en septiembre de 2022 entró el vigor el decreto y las autoridades de los 60 ayuntamientos se comprometieron a realizar las reformas correspondientes en sus bandos y reglamentos en materia de ventas y consumo de bebidas alcohólicas, con el objetivo de reducir la incidencia de hechos delictivos accidentes de tránsito conflictos vecinales agresiones y disturbios.

En el decreto se establece la facultad  del poder Ejecutivo para implementar la adecuada regulación en el funcionamiento de los establecimientos dedicados a la venta y consumo de bebidas alcohólicas.