En un notable reconocimiento para el estado de Tlaxcala, el presidente municipal de Huamantla, Salvador Santos Cedillo
En un notable reconocimiento para el estado de Tlaxcala, el presidente municipal de Huamantla, Salvador Santos Cedillo, ha sido posicionado dentro del top 10 de los alcaldes mejor evaluados de México, según el más reciente estudio presentado por la empresa Mitofsky, que clasificó a los 150 mejores ediles del país.
El alcalde Santos Cedillo no solo destaca entre los mandatarios municipales mejor calificados a nivel nacional, sino que también se ha posicionado como el presidente municipal del Partido Verde Ecologista de México mejor evaluado en todo el territorio mexicano, superando a figuras como Luis Ernesto Munguía de Puerto Vallarta, Jalisco, y Juan Manuel Navarro de Soledad de Graciano Sánchez, San Luis Potosí.
El edil huamantleco, quien se ha caracterizado por su estilo de gobierno activo y propositivo. Una de las estrategias que ha distinguido su administración es el constante recorrido por las comunidades del municipio, donde mantiene un diálogo directo con los ciudadanos para identificar problemáticas y construir soluciones conjuntas entre gobierno y población.
Entre los logros más significativos que han marcado la gestión de Santos Cedillo destacan: contar con los policías mejor remunerados del estado de Tlaxcala, fortaleciendo así la seguridad pública municipal.
También destaca la creación de una clínica veterinaria para perros y gatos, atendiendo una de las principales demandas ciudadanas.
Asimismo, una distribución equitativa de los recursos públicos entre todas las comunidades, garantizando que cada una reciba acciones de impacto social.
Además, el récord Guinness por la elaboración de la alfombra de aserrín más grande, con 3 mil 932 metros, que pone en alto el trabajo artesanal de los huamantlecos.
Esta posición destacada de un presidente municipal tlaxcalteca en las mediciones nacionales representa un orgullo para el estado y refleja un modelo de gobernanza cercana a la ciudadanía, donde la atención a las necesidades básicas y el diálogo constante con la población han marcado la aprobación ciudadana.