Fuente: El Universal

Sin descuidar a su público de Latinoamérica pero aprovechando la oportunidad de abrirse nuevos caminos es como la agrupación Reik triunfó en su reciente visita a Corea como parte de un intercambio cultural junto a la banda de K-Pop MBLAQ.

“Lo más fuerte para nosotros es tener la madurez. Es impresionante que llenamos cuatro Auditorios Nacionales y al llegar a Corea con poquita gente te sientes como en el primer disco cuando a penas te estás dando a conocer, pero el surgimiento es muy padre porque es como el regreso a las raíces y esas ganas de cómo le vamos a hacer”, compartió Julio Ramírez a EL UNIVERSAL.

Como un acuerdo entre Televisa y la televisora asiática es como los eligieron para representar a México después de que los coreanos dieran un concierto el pasado 8 de agosto en el Pepsi Center. Ahora tocó el turno a los mexicanos, que cerraron con una presentación donde cantaron junto a MBLAQ la versión en inglés de “Creo en ti” ante un público que, aunque no sabían las canciones, aplaudían y gritaban.

“Con todo y lo famoso que puedas ser existe mucho respeto. Cuando hay momento de estar callados lo son, cuando es momento de gritar lo hacen y aplauden cañón, si los de seguridad les dicen: ‘hasta aquí llegas’, de verdad respetan. Es muy curioso; no es que esté mal, a lo mejor es lo que le da sabor al público mexicano, que si los de seguridad los para, se brincan la barda y no les importa”, indicó de su visita, en donde también compartieron el festival con otros grupos.

Julio comenta que rompieron a barrera del idioma en las conversaciones con traductores, incluso tuvieron posibilidad de comer con el Embajador de México en Corea, José Luis Bernal, con el cual tuvieron mucha afinidad, ya que es originario de Mexicali, igual que ellos.

“Fue impresionante cuando fuimos a la escuela de estudiantes de español; todos sabían nuestras canciones, las pedían y cantaron junto con nosotros: ‘Noviembre sin ti’ fue algo que nos marcó muchísimo”.

Impresionados con el país

Dentro de sus aprendizajes, Julio destacó la comida típica y la cultura coreanas, lo que consideró fue muy divertido. “Fue una gran experiencia, no esperábamos ir a Corea y desde que llegamos conocer la ciudad fue padrísimo. Seúl es bastante moderno y parece un poco Estados Unidos, pero con su propia identidad en cuanto a los edificios y la infraestructura”, dijo.

Después de esta experiencia, el trío ya piensa en la posibilidad de tener más temas en inglés e incluso hacer un dueto con alguna agrupación de K-pop para continuar con los frutos de esta visita. Por lo pronto, los músicos recibieron una propuesta para ir a Shangai.