Fuente: El Universal

Los finlandeses de The Rasmus vinieron a México a pedir unos besos, con la canción de Consuelo Velázquez, Bésame mucho, derritieron a varias fanáticas que les perdonaron el cambio abrupto de género.

A las 20:30 horas la oscuridad se mimetizó con el atuendo de los asistentes, quienes portaron el negro con orgullo, mientras que algunas seguidoras presumieron las plumas que adornaban sus cabelleras, al puro estilo de Laurie Ylönen, vocalista de la banda.

Con un recital muy esperado los seguidores de la banda se dedicaron a corear los temas que volvieron un éxito a los originarios de Finlandia, quienes aprovecharon la oportunidad para practicar su breve español, ondear una bandera mexicana y complacer a la audiencia, con temas como Livin'in a world without you, First day of my life, Keep your heart broken, entre otros.

Entre brincos, bailes y canciones "oscuras", algunas chicas no soportaron la euforia y el calor de estar en las primeras filas, lo que las hizo desertar y terminar en la parte trasera del inmueble en donde fueron atendidas por personal de protección civil.

Lauri Ylönen, Pauli Rantasalmi, Eero Heinonen y Aki Hakala, agradecieron la oportunidad de estar en México y aseguraron que estos días han sido hermosos. "Muchas gracias, México", expresó Lauri.

Al dejar el escenario por primera ocasión, los fans insistieron para que la velada musical continuara aunque no sabían exactamente cómo hacerlo, si en inglés o español.

Antes de despedirse de los asistentes que se dieron cita en el Pepsi Center, los músicos interpretaron las canciones más conocidas y recientes de su repertorio como Guilty, In the Shadows, Stranger, In my life, entre otros.

Con dos horas de rock estilo gótico, The Rasmus dejaron complacidos a aquellos que esperaron mucho por verlos de nuevo en México, a los que los vieron por primera vez y a muchos padres que esperaron pacientemente a sus hijas e hijos, quienes brincaron, bailaron y cantaron, los temas de una de las bandas más reconocidas en el género.