Fernando Díaz de los Ángeles

Aún falta tiempo sin embargo en algunos partidos políticos ya empiezan a sonar nombres de mujeres y hombres para la sucesión gubernamental a mitad de la administración del gobernador Mariano González, tales personajes ya empiezan a tomar impulso, y si no la militancia de los respectivos partidos se los dan, como es el caso en  Acción Nacional donde hay interés entre los militantes sobre el candidato o la candidata al gobierno  del Estado, sin duda son varios los perfiles, por lo tanto en este instituto político habrá tela de donde cortar, lo  mismo puede ocurrir en el PRD –aunque sus militantes no muestran tanto interés como en el PAN-   pues la senadora Lorena ha dejado claro sus aspiraciones,  tibiamente el diputado federal Humberto Vega ha alzado la mano y el efímero ex candidato a la gubernatura Gelasio Montiel no se descarta, en contraste en el PRI parece que las opciones están escasas   y  las pocas aún están laxas.

El gabinete estatal será el centro de los reflectores para buscar al candidato o la candidata  del tricolor, después de perder los principales municipios en los comicios electorales  de julio pasado, ya que tampoco cuenta con algún legislador en la cámara alta y su única diputada federal ha pasado desapercibida en su primer año de tres de actividades legislativas, y aún está en veremos el tema de Noé Rodríguez Roldan, a quien muchos de sus correligionarios no lo ven con las tablas suficientes para poder entrar al juego de la sucesión.

Hay que considerar que para el PRI  no es fácil tener un personaje que repunte rumbo a la gubernatura, después de las  dolosas derrotas en la mayor parte de los municipios de la entidad, lo cual con lleva a tener menos perfiles para promoverse a ostentar la mayor envestidura gubernamental de Tlaxcala.

En el  PRD, la senadora Lorena Cuellar es la que al momento lleva la delantera en los reflectores, pero a partir de enero las cosas pueden cambiar, los resultados para ella y su estructura en las elecciones de julio no fueron los que aspiraban, pero no ello no provoca merma en la intención de ser la una de las aspirantes al gobierno del Estado, aunque se vislumbra que en su intento  tendrá que lidiar severamente con sus compañeros de partido y con la sombra de MORENA.

En el PAN, ya hasta se han presentado destapes y circulan en las redes sociales encuestas, que anuncian el posicionamiento de algunos personajes, sin embargo en el blanquiazul debe haber mucha cautela en el camino conquistado, ya que a partir de enero gobernará a un número considerable  de tlaxcaltecas y con ello habrá mayor responsabilidad y si no se cumplen con las expectativas todo se puede revertir con el voto de castigo, y para muestra está el PRI en la capital  que después de una gestión decepcionante abono a la causa panista.