Un arrendador de Illinois sospechoso de matar a puñaladas a un niño de seis años y herir de gravedad a su madre fue acusado el domingo de crimen de odio. La policía y familiares dijeron que había atacado a las víctimas por su fe islámica y como respuesta a la guerra entre Israel y Hamás.
En los últimos días, la policía local y las autoridades federales de Estados Unidos han estado en alerta por la violencia impulsada por movimientos antisemitas o contra los musulmanes. Miembros del Buró Federal de Investigaciones (FBI en inglés), al igual que grupos judíos y musulmanes, han reportado un incremento de los mensajes amenazantes o de odio.
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