La gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros modificó la ceremonia de pega de bandos solemnes y el tradicional recorrido por distintos lugares de la capital y las sedes de los poderes se realizó a puerta cerrada y apoyándose en funcionarios que la vitorearon para intentar acallar los reclamos del sindicato 7 de mayo.
Ante el conflicto con trabajadores por el cambio en el sistema de prestación de servicios médicos, la gobernadora tuvo que buscar apoyó de varios trabajadores que vitorearon su nombre, mientras sindicalizados del 7 de Mayo protestaban frente al palacio de gobierno exigiendo se solucionen sus demandas.
Derivado de la protesta de los sindicalizados la ceremonia cívica se hizo a puertas cerradas en el patio central de Palacio de gobierno y la mandataria sólo hizo la colocación de dos Bandos, dejando inconclusa la colocación de estos, pues no terminó el tradicional recorrido de este acto hacia el Congreso del estado y la presidencia municipal de Tlaxcala.
Entre los funcionarios que apoyaron a la gobernadora se encontraron miembros del gabinete de primer nivel.
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