Tras la muerte de su compañero Margarito N., elementos de la policía municipal de Apizaco pararon labores para exigir condiciones y garantías para realizar su labor, pues reprocharon que el elemento caído no iba armado para enfrentar a los delincuentes que lo recibieron a balazos.
Los policías de la Dirección de Seguridad Pública, Vialidad y Tránsito de Apizaco demandaron al alcalde interino Carlos Hernández Castillo y el director Eduardo Villarreal Badillo, garantías para desempeñar su labor en la que arriesgan la vida al enfrentar a la delincuencia en el municipio que ha sido escenario de una creciente inseguridad en los últimos años.
Recriminaron que pese a que se les prometieron condiciones para realizar su trabajo con equipo, el policía que murió tras ser herido al atender un reporte de robo no iba armado y estaba indefenso para realizar su labor.
Y es con 23 años de servicio, Margarito N. de 46 años falleció tras recibir un balazo en el tórax cuando acudió a atender un reporte de asalto a una farmacia.
Margarito N. acudió a un asalto a una farmacia ubicada sobre el bulevar "La Libertad" y al llegar fue recibido a balazos por los agresores que lograron escapar dejando al oficial herido.
El elemento aún fue trasladado al hospital para su atención médica, pero debido a la gravedad de las heridas falleció en el nosocomio mientras era intervenido quirurgicamente.
Por lo pronto, el paro de labores de este miércoles deja sin seguridad al municipio rielero.
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