Alrededor de las 3:00 am del pasado miércoles 1º de septiembre de este 2021, dos sujetos encapuchados con pasamontañas de color negro, quienes portaban escopetas de cacería y pistolas de tipo revolver irrumpieron en el invernadero propiedad del Ing. Miguel Abdón Pérez López situado en la cabecera municipal de Atlangatepec, Estado de Tlaxcala, golpearon con las armas y palos al Ing. Miguel Abdón Pérez, quien en ese momento se había levantado a sacar el agua de lluvia que se introdujo en el lugar donde pernoctaban, hasta someterlo físicamente.
Posteriormente uno de los asaltantes se introdujo en el único cuarto que tiene funciones de dormitorio y bodega, donde su esposa la Sra Francisca Alba y su hijo Kiro Pérez Alba de 15 años de edad, se habían despertado al escuchar los gritos y golpes a unos pasos fuera de la puerta.
Después de someter a golpes a los tres miembros de esta familia los amarraron de pies y manos dejándolos en el piso de su pequeña habitación. Encañonando con las armas y amenazando con asesinar a su hijo menor, lograron que el joven adolescente les entregara el dinero en efectivo producto de la venta de su cosecha, sus llaves de todas sus instalaciones y casa, sus teléfonos celulares y la computadora portátil del joven, quien es alumno de nuevo ingreso de la preparatoria agrícola de la Universidad Autónoma Chapingo.
Los hechos se denunciaron ante la unidad de atención inmediata zona norte de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Tlaxcala con sede en el Municipio de Apizaco, iniciándose la carpeta de investigación: C.I.UITLX/67/2021 donde se han realizado algunas actuaciones periciales.
Dos días después, la madrugada de este viernes 3 de septiembre, varios sujetos pasaron frente a su domicilio particular ubicado a 5 minutos del invernadero, en la comunidad de San Pedro Ecatepec, del mismo Municipio de Atlangatepec, gritando su nombre en repetidas ocasiones y posteriormente se subieron a la azotea de su casa a través de un árbol ubicado en la banqueta frente al domicilio, donde estuvieron golpeando el techo de la vivienda por alrededor de 30 minutos.
Este acto posterior, secuela del robo y la agresión física es evidencia de una acción más compleja e intimidatoria típica de la delincuencia organizada en contra de la familia Pérez Alba, y pone claramente en riesgo la vida y patrimonio de esta familia. Por ello solicitamos la URGENTE intervención de las autoridades estatales y federales para proteger la seguridad de nuestros compañeros, quienes permanecen en el domicilio antes mencionado bajo una situación de terror al lado de su hijo adolescente.
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