En las panaderías de municipios como Apizaco, Huamantla y Tlaxcala es notable que este año muchas familias prefirieron no comprar la tradicional rosca de reyes, toda vez que el rubro en donde si hubo un consumismo notable fueron en los respectivos mercados de juguetes.
Además algunos vendedores narraron que que en años anteriores, aproximadamente a las cinco de la tarde del 6 de enero, ya se habían agotado poco más del 50 por ciento del total de producción panadera y este año "la situación nos pintó diferente".
Así, en algunos comercios la afluencia de clientes fue baja con respecto de otros años, y tratando de cumplir las normas sanitarias de salubridad.
Sin embargo, cabe remarcar que pese a las bajas ventas de roscas, la economía de las panaderías les permite seguir, así lo recalcó Ricardo N., quién se desempeña como panadero en el municipio de la capital tlaxcalteca.
"Pues a lo mejor hoy la gente no compró mucho, pero de todas formas eso se recupera en los próximos días, porque la gente no deja de comprar pan", expresó.
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